Los acortadores de enlaces son herramientas que permiten reducir los caracteres de un enlace o dirección web (URL).
De esta forma se puede hacer que largas direcciones pasen a reducirse (acortarse, de ahí el nombre) hasta en un 90%.
Por lo tanto logramos que las direcciones largas sean más fáciles de escribir y más estéticas para la vista con lo que podemos conseguir más visitas a dichos enlaces.
Podemos encontrar multitud de páginas web que nos permiten acortar las URL tanto las que nos pagan por ello como las que no nos pagan por usar el acortador.
Entre las primeras tenemos a https://exe.io/ por poner un ejemplo de las páginas que pagan por acortar enlaces y entre las segundas podemos encontrar a https://bitly.com/ por poner un ejemplo de páginas que no pagan por acortar nuestros enlaces.
¿Para qué se usan los acortadores de URL?
Dependiendo de cual sea el acortador de enlaces que utilicemos podremos:
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Ganar dinero con los enlaces cuando los usuarios hacen clics en nuestros links estas empresas nos pagan una pequeña cantidad de dinero que va en función del país de origen de la persona que ha hecho clic en nuestro enlace.
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Obtener estadísticas de los clics de ese enlace: cuantas veces se ha hecho clic en ese enlace, región geográfica de la persona que ha hecho clic, etc.
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Ahorrar caracteres al publicar en redes sociales: de esta manera se evita compartir enlaces que ocupen varias líneas de texto. Además se gana espacio en publicaciones como Twitter que tienen un límite de caracteres. No es lo mismo poner un enlace acortado que nos ocupa 20 caracteres que un enlace de afiliado a una determinada web con más de 100 caracteres.
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Personalizar la URL: sustituyendo las letras y números aleatorios que nos da la herramienta en cuestión por una URL personalizada. Ejemplo: bit.ly/AtcPr98ac4 por bit.ly/Beruby
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Programar las actualizaciones en redes sociales desde las propias herramientas para acortar.